Conste que me parece absolutamente válido que se usen todo tipo de recursos para vender un producto. Lo que no acierto a entender es como una gran multinacional decide invertir tantísima pasta para que, en vez de anunciar su producto, las agencias se monten una paranoia que solo sirve para que otros publicistas les premien con alguna figurita de bronce dorado (o incluso de metacrilato). Y si consigue conectar con el público, puede que incluso su slogan acabe formando parte del lenguaje popular (aunque nadie recuerde que narices se estaba anunciando).
Este último parece ser el caso del dichoso anuncio del "bi guoter maifrend". Un Bruce Lee imbuido por el espíritu de Hermida intenta darnos lecciones de wu wei (una forma de tao oriental) y lo único que consigue es dar lástima. ¡Pobrecico! diría mi abuela ¡Un mozo tan majo y echao a perder de esa manera! A pesar de que el spot consigue llamar nuestra atención ¿alguien recuerda que coche anuncia? ¡No vale la marca, tiene que ser el modelo de coche!.....Ni idea ¿verdad?...
Ya que el anuncio no servirá para vender más coches como mínimo los publicistas tendrán el consuelo de que ha calado y ya ha sido parodiado varias veces. Ayer, en "Homo Zapping News" (programa nº 20) hicieron una versión en que el el Carlanga recomendaba como fórmula para ser feliz en la vida "¿Te gusta vivir bien. Be Borbón, my friend" (jua,jua,jua,...). Si alguien consigue un enlace que me lo pase, que lo colgaré aquí(no hay manera de enlazar la página de HZ). Hasta entonces nos tendremos que conformar con un vídeo en el que aparecen más fragmentos de la misma entrevista.
http://www.metacafe.com/watch/23744/bruce_lee_lost_interview/

"Be Borbon, my friend", je,je,je...
¡Es que es muy bueno!
2 comentarios:
Por casualidad, vi el Homozaping News justo cuando salía Fernández imitando al Rey con el "Be Borbón, my friend". Fue muy bueno realmente.
Por cierto, el anuncio de Bruce Lee anuncia compresas, ¿NO?
Oye, de meterse con Bruce Lee ni de coña, eh... Que me convierto en agua y me pongo a repartir patadas voladoras.
Candelman.
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